Aoiz y Lumbier salen a la calle para celebrar San Isidro
Hogueras, procesiones y danzas populares completaron sus programas austeros
La comparsa agoizka abrió la concurrida procesión, seguida del santo. (Marian Zozaya) |
Lumbier. Aoiz y Lumbier disfrutaron ayer del día de San Isidro, fiesta arraigada en las dos villas que recuerda la importancia de su pasado agrícola. Con programas sencillos y austeros, han podido sin embargo, disfrutar varios días de la combinación de tradición y fiesta con hogueras, procesiones y danzas populares .
Ayer tocaba honrar al santo. Y en Aoiz se vivió la procesión más concurrida de los últimos años. San Isidro, portado a hombros por Fran Jaso, Luis Prieto, Javier Unzué y Miguel Itúrbide, recorrió las principales calles agoizkas, antes de la misa, precedido de la comparsa de gigantes y cabezudos y de los gaiteros locales. Después visitaron las últimas calles rehabilitadas y recién estrenadas a finales del mes de abril: la Bajada al Molino, Travesía del Horno, la calle Angosta y la de Francisco Indurain. La reforma ha consistido en levantar el pavimento, cambiar desagües, separar desagües y aguas sanitarias, y canalizar gas, alumbrado, electricidad y telefonía, según explicaba el concejal de Urbanismo, Alberto Beroiz. El presupuesto ha sido de 380.000 euros y ha sido financiado por el Gobierno de Navarra al 70%. La tarde volvió a ser para la fiesta, con la chocolatada popular seguida de la tradicional Jota del Chocolate con los dantzaris y gaiteros de Aoiz.
En Lumbier, el sonido de la aurora y el txistu llamó a la fiesta. Los alumnos de 5º y 6º de la Ikastola Arangoiti, respaldados por miembros del grupo de mayores, afinaron sus txistus puntuales según el programa oficial. Su participación fue amplia en la hoguera de la víspera, que reúne a los de casa cada año en torno al fuego, el vino y las magdalenas de San Isidro.
La imagen de San Isidro también recorrió ayer sus principales calles, en este caso a hombros de José Iriarte, Jesús del Castillo, Santi Eleta y José Mari Labairu, precedidos del abanderado, Jesús Iribarren, y de la comparsa y gaiteros, mientras que fue la nutrida banda la que cerró la comitiva hasta la iglesia. Por la tarde, todos los alumnos de la Ikastola dieron lo mejor de sí mismos con las danzas populares; desplegaron su amplio repertorio como viene siendo habitual en los últimos años, cubriendo el programa del día 15. La Ilunberriko Txaranga, el toro de fuego y el baile de la Era cerraron estas fiestas.
Fuente: Noticias de Navarra
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